
24 Jul ¿Sabías que el croissant fue resultado de una guerra?
Si eres de los que cree que el famoso croissant se inventó en Francia, venimos a desmentir ese falso mito. Aquí descubrirás el verdadero origen de esta delicia, que nos acompaña desde el siglo XVII.
El origen de croissant se encuentra en el año 1683, en La Gran Guerra Turca.
El imperio Turco avanzaba por Europa en su guerra contra el Imperio Romano Germánico.
Todo sucedió durante una madrugada: el imperio Otomano decidió penetrar los muros de Viena cavando túneles y atrapando por sorpresa a los germanos mientras éstos dormían.
Las únicas personas despiertas en aquel preciso instante, eran todos los panaderos de la ciudad, que preparaban sus masas durante la noche, para tener pan recién hecho por la mañana. Fueron ellos quienes dieron voz de alarma al pueblo, despertar a la ciudad y detener el ataque.
Contra todo pronóstico, los germanos consiguieron poner alto al imperio Otomano.
Para celebrar la victoria, los panaderos decidieron crear un bollo con forma de luna creciente, la misma luna que aparece en la bandera del imperio Turco.
Por lo que el croissant simbolizó la manera de ‘comerse a un turco’, una dulce venganza llevada a cabo gracias a la inestimable colaboración de los panaderos vieneses.
Sorry, the comment form is closed at this time.